Inicio > Familia > Cuidado > Los riesgos de no pagar un seguro

Los riesgos de no pagar un seguro

Familia
10min.
Los riesgos de no pagar un seguro

El valor y tranquilidad que aporta un seguro es innegable. Sin embargo, la cuantía y periodicidad de los pagos pueden convertirse en una losa para las economías personales o familiares más frágiles, quienes a menudo deciden no pagar un seguro con el objetivo de centrarse en afrontar otros gastos a priori más urgentes. ¿Es realmente la mejor idea?

El valor y tranquilidad que aporta un seguro es innegable. Sin embargo, la cuantía y periodicidad de los pagos pueden convertirse en una losa para las economías personales o familiares más frágiles, quienes a menudo deciden no pagar un seguro con el objetivo de centrarse en afrontar otros gastos a priori más urgentes. ¿Es realmente la mejor idea?

El seguro de casa, el del coche, el de salud, el de la mascota, el de decesos, el dental… Vivimos rodeados de seguros. De hecho, es difícil que, como mínimo, no tengamos contratados un par, algo nada complicado teniendo en cuenta que algunos de ellos son obligatorios. Otros, en cambio, son altamente recomendados. Si te preocupa tu tranquilidad, en este blog ya hemos hablado de qué seguros debes contratar, pero en este artículo vamos a hablar de lo contrario: los riesgos que trae no pagar el seguro.

Los principales riesgos de no pagar un seguro

Cada tipo de seguro tiene sus particularidades pero, en general, no pagar un seguro conlleva una serie de consecuencias que aplican al gran grueso de este tipo de productos, independientemente de si son personales (seguro de vida o de accidentes, por ejemplo), patrimoniales (seguro de hogar, de coche o de empresa),  o de servicio (seguro de viaje o asistencia en carretera).

Pérdida inmediata de la cobertura

Puede que sea la más evidente, pero también es la primera en manifestarse: la omisión de una cuota motiva la retirada de las coberturas a la persona u objeto asegurado, lo que significa que no cubrirán ningún siniestro o evento para el que fueron contratados, independientemente de que las anteriores cuotas fueran abonadas correctamente y a tiempo.

Esto es especialmente clave en temas de salud, hogar y empresa ya que cualquier imprevisto podría tener que afrontar fuertes gastos y trámites nada agradables. Y es importante remarcar que si se abona la cuota en breve las coberturas se recuperan sin ningún tipo de problema.

Cancelación de la póliza

Si el pago no se abona en un tiempo prudencial, la aseguradora procederá a cancelar la póliza. El periodo de margen suele ser de cinco meses desde el primer impago, aunque esto es un dato aproximado y puede variar en función de cada tipo de seguro o proveedor.

Es importante recordar que durante esos cinco meses (o los que sean en cada caso particular) se irán acumulando las siguientes cuotas, por lo que pasado ese tiempo la aseguradora no solo quiere la primera cuota, sino que espera recibir las cinco. Así que mejor pagar cuanto antes para evitar que el desastre sea cada vez mayor.

Empezar a recibir reclamaciones 

Las aseguradoras, como cualquier empresa -y persona-, quieren su dinero. Así que esté o no cancelada la póliza, es habitual que las personas que no paguen el seguro empiecen a recibir notificaciones en forma de mensajes, emails, llamadas o cartas reclamando el monto adeudado.

Si este método no surte efecto, las aseguradoras dan un paso más allá emprendiendo acciones legales contra el cliente. Es importante tener en cuenta que si el impago del seguro pasa por vía judicial se pueden generar unos sobrecostes derivados del proceso tales como intereses o costas, los cuales son responsabilidad del perdedor. La buena noticia es que suelen avisar primero como medida de presión, pero es igual de cierto que la gran mayoría cuentan con el respaldo de expertos o departamentos legales, lo que les permite iniciar este tipo de medidas con relativa facilidad y sin que ello les suponga un sobrecoste.

Aparecer en un fichero de morosos

Los registros de morosos o ficheros de solvencia patrimonial son listas en que se registran personas o empresas que han incurrido en algún tipo de impago de deuda que todavía no han solventado. La más famosa es ASNEF, pero no es la única. El Registro de Aceptaciones Impagadas o RAI, el CIRBE, Experian, el ICIRED o el BDMI, que es de inquilinos morosos, son solo algunas a las que se suman las listas privadas que manejan y comparten algunas empresas o conglomerados corporativos.

Aunque, de nuevo, hay matices entre unas y otras, aparecer en una de ellas es sinónimo de malas noticias, ya que causan cosas como:

· Problemas para obtener financiación: Cualquier hipoteca, préstamo personal, crédito o tarjeta que se solicite será denegada debido a que se considera un perfil de alto riesgo.

· Dificultades con proveedores de servicios: Del mismo modo, operadoras eléctricas, de agua, telefónicas o de internet pondrán problemas a la hora de contratar cualquier servicio.

· Denegación de alquileres: Si se busca una vivienda en régimen de alquiler, encontrarse en algún listado de morosos es motivo más que suficiente para cancelar la solicitud.

· Problemas laborales: A la hora de entrar en un nuevo trabajo o empezar a trabajar con nuevos clientes en el caso de autónomos es posible que se revisen este tipo de detalles.

Aunque hallarse en estas listas es un tema serio, no es algo irreversible. Tal y como vimos en el artículo de cómo salir de ASNEF, todo se trata de planificación, voluntad y negociación.

¿Qué pasa si dejo de pagar ciertos seguros concretos? 

Aunque son productos muy similares, no todos los seguros protegen lo mismo ni funcionan igual. Esto también aplica a los casos de impago, ya que ciertas tipologías de seguros incluyen consecuencias específicas que van más allá de las que acabamos de ver.

Seguro del coche 

La Ley exige que cualquier propietario de vehículo tenga un seguro de responsabilidad civil para poder circular. El famoso seguro a terceros protege a otras personas de cualquier posible accidente que podamos tener, por lo que no contar con uno o no tenerlo en vigor (es decir, sin pagar) conlleva diversos problemas más allá del daño causado a otras personas y la obligación de tener que afrontarlos a nivel económico al no estar las coberturas activas.

El problema más común es la multa. si un vehículo sin seguro en vigencia circula puede recibir una multa que oscila empieza en los 600 y termina con 3.000 € para casos de multirreincidencia. A ello puede añadirse una inmovilización del vehículo. Cabe remarcar que este tipo de sanciones no acarrean la retirada de puntos del carnet.

Por último, muchos seguros de coche tienen una pequeña particularidad: el periodo de gracia. Si existe un primer impago no cortan la cobertura de inmediato, sino que la mantienen durante un mes como medida de protección para los otros ciudadanos. Eso no significa que no vayan a reclamarlo, ni tampoco que pasado el mes sí se pierda el respaldo del seguro y, por tanto, estemos expuestos.

Seguro de decesos

Además de los problemas básicos como la pérdida de las coberturas y las posibles acciones legales, dejar de pagar un seguro de decesos tiene algún que otro inconveniente extra que debemos conocer. El primero es que un único impago puede hacer que se pierdan todos los beneficios acumulados que ofrecen este tipo de seguros como, por ejemplo, descuentos, componentes de ahorro y otros beneficios extra asociados. Aunque se abone la cuota debida es muy posible que no se vuelvan a recuperar, teniendo que empezar otra vez desde cero.

El segundo y probablemente el más importante es que, a pesar de haber pagado con anterioridad, un impago traslada la responsabilidad de abonar el funeral a la familia. Dicho de otra manera, el fallo en una cuota autoriza a la aseguradora a no hacerse cargo del sepelio, tal y como estaba especificado en la naturaleza del seguro. Si se da esta situación es importante remarcar que tampoco existe posibilidad de devolución de las cuotas pagadas con anterioridad.

Seguro de mascotas

Seguro de mascotas

Como seguro sabrás si tienes a un perro o a un gato en casa, las mascotas requieren por Ley de un seguro. Si se deja de pagar, además de las consecuencias que ya hemos visto, el propietario/a se expone a multas que oscilan desde los 500 € hasta los 20.000 € que estipula la Ley de Bienestar Animal española.

A parte de las sanciones administrativas es necesario recordar que si el seguro de mascotas no está vigente debido a un impago y el animal causa daños a una tercera persona o propiedad, la responsabilidad de todo recae sobre el dueño/a, lo que significa hacerse cargo de todos los costes derivados del accidente, lo cual puede acabar saliendo muy caro.

¿Has dejado de pagar el seguro? Esto es lo que debes hacer

Como hemos visto, fallar una cuota de algún seguro es el inicio de una cadena de infortunios que empieza por perder cualquier garantía. Ninguna broma. Para solventar este creciente problema es esencial actuar con celeridad, ya que es la mejor forma de evitar tener que afrontar las peores consecuencias. Dicho esto, ahí van nuestros consejos:

Paga cuanto antes

Si dispones del dinero para afrontar la cuota lo mejor es pagar. Puede que te toque tirar de ahorros o apretarte el cinturón y eliminar ciertos gastos o caprichos, pero es mejor recuperar la tranquilidad (en todos los aspectos) cuanto antes.

¿Crees que el problema va a ir repitiéndose cada mes? Si el seguro se está convirtiendo en una carga financiera es momento de evaluar si realmente es esencial o puedes hallar alguna opción más económica (echa un vistazo a nuestro artículo sobre cómo ahorrar en la contratación de los seguros) La otra opción, mucho más drástica, es cancelar el seguro. Pero ya sea un cambio o una cancelación, es esencial haber afrontado antes cualquier cobro que nos hayan realizado.

Si se trata de algo esencial, como un seguro de salud, se pueden explorar otras opciones como un préstamo personal o, mejor aún, un crédito directo, el cual te permite obtener una cantidad de dinero suficiente para afrontar la cuota del seguro e ir devolviendo el importe mes a mes. Además, como el límite de solicitud de dinero es relativamente bajo, será siempre más fácil de devolver. Sin embargo, como expertos en créditos, hay ciertas guías a tener en cuenta para hacer un buen uso de este tipo de productos en estos contextos.

· Tiene mucho más sentido solicitarlo cuando el pago del seguro es anual

· Debemos asegurarnos que podemos afrontar las mensualidades del crédito con comodidad

· No deben financiarse lujos como seguros de viaje

· Debe solicitarse al inicio, ya que de aparecer en un listado de morosos no se concederá

Habla con la aseguradora

Aunque los contestadores automáticos y las IAs parece que ha enfriado nuestra relación con muchas empresas, al otro lado siempre podemos encontrar a un humano con el que hablar y sincerarnos acerca de nuestra situación. Reconocer el impago, justificarlo si es necesario y proveer un plan de pago demorado es una gran idea en cualquier contexto. Y es que un ataque es la mejor defensa. Los resultados pueden ser variables, pero de lo que no cabe duda es que nos miraran con unos ojos más benevolentes. Y es que cualquier aseguradora prefiere a un cliente que acude a ellos con actitud de solucionar las cosas antes que a uno que tienen que ir a buscar.

Este sincericidio puede tener otras ventajas. Y es que no es nada raro que las aseguradoras estén dispuestas a sentarse a negociar formas más de satisfacer la deuda más cómodas para el cliente como la realización de un plan de pago o la renegociación de condiciones. Esto, además, detendrá otros procesos como que se emprendan acciones legales.

Contar con un abogado/a, el último bastión

Cuando ya se han sobrepasado las anteriores fronteras, el impago del seguro cobra una nueva dimensión. En el caso de que toque hacer frente a denuncias por vía judicial es básico contar con un abogado especializado en este tipo de temas, a poder ser. Los hay que también ofrecen ayuda en caso de aparecer en una lista de morosos. En este caso interceden en la negociación de la deuda y llevan a cabo los trámites de notificación a la lista de que la deuda ha sido saldada.

Sigue aprendiendo más sobre cuidado y finanzas 

En ViveMásVidas encontrarás un montón de contenidos útiles y gratuitos para mejorar el cuidado de lo más importante: la familia. Por eso encontrarás info sobre ayudas para familias, información útil para el bienestar de los más pequeños de la casa y hasta trucos y consejos para tus mascotas. ¿A qué esperas para seguir descubriendo todo lo que te ofrece este blog?